Carta a las bases de la ISO

March 26, 2019

El Comité Directivo de la Organización Socialista Internacional envió esta carta a su membresía informando sobre una profunda crisis interna. Ahora la compartimos públicamente aquí en Obrero Socialista. La hemos editado ligeramente para su difusión en un sitio web público y hemos agregado información actualizada.

HACE TRES semanas, la ISO celebró su Convención más importante, y también la más dolorosa. Gran parte de la Convención se dedicó a discutir los efectos dañinos de nuestras prácticas políticas y nuestra cultura política interna. A medida que se han ido reportando estas discusiones en nuestras células, se han abierto más discusiones, y han surgido más ejemplos de una cultura política dañina. Esta breve carta del nuevo Comité Directivo (SC, por sus siglas en inglés) fue escrita para informar a las y los camaradas sobre estos incidentes y dar una actualización sobre los pasos que vamos a tomar para cumplir con los mandatos emitidos por la Convención, y al mismo tiempo ofrecer algunas ideas sobre cómo proceder.

Mientras esta carta se redactaba, el SC (así como varios miembros del Comité Nacional (NC, por sus siglas en inglés) y varias aliadas socialistas-feministas) recibieron un documento escrito por una ex-miembra (EM de aquí en adelante), que detalla las formas en que el SC electo en 2013 había mal manejado una denuncia de violación ese mismo año. Además, el documento explicaba que el demandado en la acusación recién había sido electo para nuestro SC en la Convención de este año. EM fue parte del Comité Disciplinario Nacional (NDC, por sus siglas en inglés) que originalmente escuchó el caso. El recuento de EM ha sido corroborado por otros miembros del NDC de aquel entonces que siguen activos en nuestra organización. Agradecemos a EM por haberse tomado el tiempo de escribir esto y comunicarse con nosotros. EM copió también en el correo electrónico a aliadas y aliados fuera de la ISO con quienes hemos trabajado en activismo socialista-feminista y queer.

El SC tuvo una reunión de emergencia el martes (12 de marzo) por la noche y luego una reunión conjunta el jueves (14 de marzo) por la noche con el NC e integrantes del comité organizador ad-hoc del Consejo Nacional de Celulas (NBC, por sus siglas en inglés), el caucus de sobrevivientes y la comisión #MeToo, para comenzar una discusión sobre las implicaciones de este documento y qué pasos se deben seguir. Estos son algunos de los pasos inmediatos que hemos tomado:

Respondimos inmediatamente a EM y a las aliadas y aliados que fueron copiados en el correo electrónico para agradecer a EM por enviarlo, informándoles que lo haríamos circular para ser discutido en nuestra condición de líderes de la organización, y para expresar que reconocíamos la seriedad del caso.

El martes (12 de marzo), después de que integrantes del SC solicitaron que el acusado se identificara y renunciara, este lo hizo, renunciando voluntariamente al SC y diciendo que tomaría un permiso de ausencia. El SC votó y acordó suspenderlo, estipulando que se tomaría una decisión sobre su membresía más adelante.

El jueves, la reunión conjunta de NC, SC y demás miembras y miembros acordaron por unanimidad expulsar al demandado de acuerdo con la decisión original del NDC. Además, la reunión votó para suspender de la membresía a tres miembros del SC electo en 2013 que influyeron directamente en el resultado del caso, mientras se lleva a cabo una investigación completa de lo que sucedió en el 2013. La reunión también votó para suspender a los miembros del SC de 2013 de sus puestos de dirección, junto con un miembro recientemente electo al NC que había tenido un rol en el socavamiento del trabajo del NDC, mientras se lleve a cabo la investigación.

Ahora necesitamos empoderar a una comisión independiente del SC actual que pueda investigar la conducta del SC del 2013 y otros participantes en el mencionado proceso del 2013. Aún debe determinarse que grupos formarán parte de esta comisión, pero formaran parte la recientemente creada comisión #MeToo, y el NDC o algún otro organismo, pero esto se decidirá pronto.

Se llevó a cabo otra reunión el sábado 17 y el lunes 18 para informar a nuestras bases del estado de la discusión y el proceso para hacer una declaración pública al respecto. También se discutió cómo crear espacios para la discusión del tema entre las bases.

Una compañera de Portland está organizando una llamada de apoyo para sobrevivientes de violación y otros compañeros que necesiten acompañamiento para lidiar con el caso discutido en este documento. También se formó un caucus de sobrevivientes y se compartieron recursos para ayuda psicológica para las y los sobrevivientes de violación y abuso.

El documento de EM es muy claro, y en lugar de editorializar, dejaremos que los compañeros lo evalúen por sí mismos. Escribiremos mucho más y ofreceremos un espacio para el análisis y la discusión de lo que ocurrió, las lecciones aprendidas y lo que debe cambiar en las próximas semanas. Creemos que se trata tanto de fallas de nuestra cultura política que hemos identificado, así como las fallas para abordar adecuadamente las necesidades de sobrevivientes, una falta de comprensión de la dinámica de la violación y la agresión sexual, y el error a la hora de crear un proceso que nos ayudara a determinar la verdad de lo sucedido por sobre los procedimientos burocráticos del caso. Esto no está separado de otros temas que hemos estado abordando y de la cultura interna que estamos tratando de transformar, aunque esta experiencia es una manifestación particularmente aguda y devastadora de esta cultura. No hay manera de salir adelante sin la mayor honestidad y evaluación crítica.

El fracaso del proceso disciplinario en 2013 fue una de las peores consecuencias de la cultura asumida por un liderazgo que ejercía demasiado control con poca rendición de cuentas. Pero hay muchos otros ejemplos. Compañeras y compañeros de grupos oprimidos sufrieron desproporcionadamente bajo estos métodos y esta cultura. En muchos casos, a estos compañeros se les cuestionó el compromiso con la organización y con el socialismo revolucionario, y se les crítico acusándolos de enarbolar “políticas identitarias” y el derecho de camaradas a agruparse en camarillas se aplastó en la práctica. Camaradas con décadas de experiencia sindical fueron vistos con sospecha al temer que se alejaban demasiado del curso establecido por el SC. Así mismo, compañeras y compañeros que levantaron críticas sobre el papel de la ISO en el nuevo movimiento socialista fueron acusados de violar principios políticos de la organización. Además, la dirección de la ISO catalogó las preguntas sobre recursos y personal como expresiones ilegítimas de sentimientos “anti-dirección”.

En la Convención, iniciamos el proceso para abordar estos temas, con miras al futuro de la ISO y la izquierda socialista. Si bien la lucha por el socialismo desde abajo sigue siendo la guía para nuestro trabajo, somos conscientes de la necesidad de hacer una pausa y mirar de cerca lo que está saliendo a la luz en estos momentos. Nuestra primera prioridad es ser responsables y rendir cuentas a los compañeros y las compañeras perjudicados por estas prácticas. También debemos aprender de estos errores y graves ofensas, y trabajar para reparar el daño causado a las personas, en la medida de lo posible. Esta es nuestra obligación con nuestros compañeros, pasados y presentes, y para toda la izquierda.

En el período previo a la Convención y luego de ella, hemos empezado a reflexionar sobre cómo un proyecto cuya intención es luchar con los oprimidos por el socialismo desde abajo pudo salir horrorosamente mal. Reconocemos que una clave para entender esto es que estamos saliendo de un período de varias décadas de retroceso y retirada de la izquierda, y ese período dio forma a las prácticas de la ISO, tanto externas como internas. Nos endurecimos para sobrevivir en medio de una izquierda mayoritariamente debilitaba.

Es importante subrayar que sin un compromiso con y una evaluación política del mundo que nos rodea, las lecciones sobre estos graves errores se pueden reducir al plano de las dinámicas interpersonales. Por eso pensamos que se requiere tiempo para escuchar, discutir y desarrollar lecciones de este caso. Si bien las dinámicas interpersonales son importantes, si nuestra evaluación se limita a esto, es poco probable que obtengamos una explicación suficiente y una ruta a seguir.

Esta carta no puede ser un sustituto de los cambios estructurales, los debates y las disculpas públicas requeridas por la Convención que están en proceso, por lo que nos restringiremos aquí a enumerar algunas de las acciones que tomará el SC en las próximas semanas para reasegurar a todas las y los camaradas que las decisiones tomadas en la Convención son vinculantes. Entre estos:

1. Establecer una comisión interna de #MeToo y comenzar a planificar la organización de una conferencia activista de #MeToo. Estas son tareas que el SC y otros organismos abordarán en las próximas semanas.

2. Perspectivas públicas que establecen los objetivos y áreas de trabajo de la ISO para que estén a la vista de todas y todos (esto tenía el mandato de aparecer a fines de marzo)

3. Desarrollar una política de Acción Afirmativa (estamos formando un subcomité para estudiar la contratación, los recursos y más)

4. Disculpa pública del SC saliente y entrante a camaradas de minorías étnicas (la Convención establece un plazo de 90 días, pero esperamos que esto se publique para fines de marzo)

5. Un Comité de Elecciones para apoyar candidaturas independientes e iniciativas de electorales, y estudiar la cuestión de cómo la ISO puede relacionarse con las campañas socialistas ejecutadas bajo la afiliación con el Partido Demócrata. (El SC designará este comité en las próxima una o dos semanas).

6. Apoyar la preparación para una Convención Especial de la ISO en septiembre enfocada en la estrategia electoral y las luchas contra la opresión.

La Convención de 2019 reestructuró radicalmente la dirección de la ISO, incluido un Comité Nacional rediseñado, un Consejo Nacional de Celulas empoderado y un Comité Directivo compuesto por dos tercios de nuevas y nuevos miembros, incluidos 50 por ciento de camaradas de minorías étnicas. Por nuestra parte, como SC nos comprometemos a facilitar apoyo a nuestras y nuestros camaradas escuchando, facilitando la discusión y sanando el daño a medida que avanzamos a través de este proceso necesario, pero difícil, hacia una nueva dirección para la ISO. Como revolucionarios, sabemos que el cambio nunca es fácil, siempre es desafiante y los resultados exitosos no pueden garantizarse.

A medida que revisamos este caso, algunos de nosotros somos más responsables que otros de estos errores. Todos compartimos la doble tarea de analizar lo que hicimos bien y lo que hicimos mal. Muchas de nuestros errores tienen lecciones para nosotros, pero otros problemas que confrontamos son relevantes para todas las fuerzas de la izquierda. Desafortunadamente, problemas de racismo y conducta sexual tóxica existen en nuestra sociedad y en la izquierda. Como tal, en lugar de tratar de esconder nuestros debates, creemos que debemos discutir y evaluar públicamente nuestros errores, y pedir a nuestros compañeros de lucha y nuestros aliados que ofrezcan consejos, asesoramiento y experiencia. También esperamos que al hablar y actuar abiertamente, las lecciones que aprendamos al enderezar nuestro barco puedan ser de alguna utilidad para que los movimientos puedan evitar algunos de nuestros errores.

A las y los compañeros que han decidido renunciar a la ISO, ya sea debido a la tensión y el estrés de los últimos años, o por haber evaluado que sus habilidades son más útiles en otros lugares en el nuevo movimiento socialista, nos comprometemos a encontrar un camino para poder volver a trabajar hombro a hombro como revolucionarios en luchas comunes.

A los y las compañeras que cuestionan si la ISO puede corregir el rumbo y emerger como una fuerza revolucionaria más efectiva, diversa y colaborativa, prometemos honestidad y esperamos que se pueda construir nuestra confianza colectiva.

A los y las compañeras que se quedan para construir el ISO y mejorar el trabajo que — con todos sus problemas — hemos cosechado a lo largo de los años, les pedimos que tengan paciencia con las y los compañeros que tienen dudas, trabajen constantemente para lograr mejoras concretas y ayuden a construir un nuevo tipo de confianza en nuestro proyecto.

Nos brindan aliento las recientes convocatorias inaugurales de camarillas de personas trans y la camarilla de personas minorías étnicas. También hay compañeros y compañeras que están reflexionando sobre sus propias acciones y las de otros en nuestra organización, y están tratando de poner sus ideas a la altura de las circunstancias para hacer frente a los errores. Estos son todos pasos necesarios para responder a las exigencias del momento, y ya no se diga para el futuro de este proyecto.

No podemos separar la tarea de cambiarnos a nosotros mismos de nuestra responsabilidad de cambiar el mundo. Pero tampoco podemos dejar a un lado la primera en favor de la última. Este será nuestro reto para los próximos meses (y años). Necesitamos crítica, debate e ideas para mejorar a medida que avanzamos juntos.

Invitamos sus comentarios, preguntas y discusión.

Publicado el 15 de marzo de 2019. Traducido por Damián Reyes y Héctor A. Rivera